Debemos tener en cuenta nuestra morfología para escoger las joyas
Tal como os prometimos la semana pasada, vamos a completar la información que os dimos sobre la elección de joyas dependiendo de las características personales de cada uno. En el post pasado, nuestro análisis fue más general, fijándonos en toda la silueta, mientras que en el post de hoy vamos a centrar nuestra atención en la forma de la cara, que es una de las características más importantes a tener en cuenta cuando se eligen los complementos que se colocan en la cabeza.
La clave para que las joyas aporten esbeltez a tu cara es elegir las que tengan una forma opuesta a la de tu rostro, y así conseguir equilibrarlo. Por eso, lo primero que debéis hacer es estudiar cuál es la forma de tu cara.
Cara con forma de Corazón/Triángulo invertido
Lo que debemos intentar es alargar visualmente la cara, para que la forma triangular no sea tan obvia. Por eso, debemos elegir pendientes largos. Busca diseños que tengan la forma opuesta a la de tu cara, es decir, forma de triángulo, o los que tienen forma de lágrima, por ejemplo. Por supuesto, debes evitar los que terminan en punta.
Sin embargo, aunque lo que queremos es alargar la cara, cuando vayamos a elegir un collar, mejor optar por una gargantilla, ya que este tipo de complemento ayuda a contrastar y suavizar el ángulo afilado de la barbilla.
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Cara con forma Redonda
De lo que se trata es de contrarrestar tanta redondez con joyas en formas alargadas. Por ejemplo, los pendientes deben ser largos, de forma ovalada, o con formas angulosas (por ejemplo, rectángulos, triángulos,…).
En cuanto a los collares, el efecto a conseguir es el mismo, se deben buscar los que alarguen tu cara, es decir, collares largos. Nunca te pongas gargantillas o collares demasiado pegados al cuello, por que harán que tu cara parezca más redonda.
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Cara con forma Cuadrada
En lo que respecta a los pendientes, debes evitar todos aquellos que tengan formas angulosas, y elegir los que sean en formas ovaladas o redondas, como los pendientes de aro. A este tipo de rostro, también le quedan muy bien los pendientes en forma de lágrima. Con pendientes de este tipo, romperemos visualmente la excesiva angulosidad de la cara.
En cuanto a los collares, mejor largos, para alargar un poco más el rostro y hacer que la cara parezca menos cuadrada.
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Cara con forma Rectangular/Alargada
Debemos intentar acortar la forma alargada de ese rostro, por lo que debemos optar por pendientes cortos y redondos. Los aros pueden sentarte fenomenal. Y por supuesto, olvídate de los pendientes largos.
Siempre elige gargantillas o collares no demasiado largos, sobre todo si tienes un cuello muy largo. Cuanto más pegado al cuello, más acortará tu rostro.
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Cara con forma Ovalada
Como ya os hemos contado en otras ocasiones, este tipo de rostro es el más versátil de todos, ya que suele favorecerles casi cualquier tipo de complemento. En lo que se refiere a los pendientes, aunque les puede quedar bien cualquier estilo, sin duda, los que mejor van con su tipo de cara son los largos (pero no demasiado largos) o los de forma triangular. Debéis evitar los pendientes redondos, ya sean aros o de botón.
La elección de los collares dependerá de si tu cuello es largo o más corto. Si es muy largo, elige collares cortos o pegados al cuello; por el contrario, si estás un poco escasa de cuello, mejor elígelos largos y alejados de esa zona.
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