Tendencia abrigos de pelo: ¿quieres saber si te sienta bien?

Un asesor de imagen analiza esta prenda fetiche para las más atrevidas

En invierno y con este frío no podemos resistirnos a hacernos con un abrigo gordito, que nos resguarde de las inclemencias. Para las más atrevidas, un abrigo de pelo puede ser la solución (natural o sintético). Pero como ocurre con todas las tendencias, no debemos colocárnoslas sin pararnos a pensar si realmente nos favorecen o no. Por mucho que nos guste una tendencia, a veces es preferible dejarla pasar, si no queremos que nuestra imagen salga irremediablemente dañada.

En el caso de los abrigos de pelo, el mayor problema que existe es el volumen que añaden. Sobre todo, si hablamos de abrigos de pelo largo. De ahí que ese diseño sea adecuado para personas delgadas, con poco pecho y pocas curvas en general.

Si tenemos unos kilos de más, mucho pecho, abdomen o caderas, el volumen del pelo no hará más que acentuar ese exceso. Por eso, en este caso podemos elegir abrigos de pelo corto (siempre teniendo en cuenta que nos sentará mejor un abrigo de otro tejido).

No lo uses si tu espalda es ancha

Lo mismo ocurre con las siluetas triángulo invertido, es decir, las que tienen más hombros que caderas. No deben usarlo por nada del mundo, si no quieren que su espalda adquiera unas dimensiones descomunales. Por el contrario, las siluetas triángulo (más cadera que hombros), pueden permitírselos, siempre y cuando el abrigo sea por la cintura y no llegue a la zona de las cartucheras.

Sobra decir que si lo usas no debes combinarlo con complementos muy atrevidos o parecerás un árbol de Navidad. Recuerda que en moda, el equilibrio y el sentido común pueden ser la clave.

¿Te ha quedado claro? ¿No sabes aun cómo puedes usarlo de forma estéticamente correcta? Consulta a nuestros estilistas y te sacarán de dudas.